Atentado en el distrito de Al Karrada, en Bagdad (Irak) | EFE
Dos atentados suicidas con coche bomba en Bagdad le costaron la vida a al menos a 180 personas e hirieron como mínimo a 230. La información sobre las bajas sigue variando tras los ataques de la madrugada del sábado en dos barrios de la capital de Irak, que fueron reivindicados por el grupo terrorista Estado Islámico (EI), que firmaría su mayor salvajada en 2016 en el país mesopotámico.
Las agencias Reuters y Europa Press hablan ya de 165 fallecidos, mientras que EFE apunta a 125 decesos y AFP deja la cifra de asesinados en 119.
Entre las víctimas hay niños y mujeres, que realizaban sus compras de cara a la festividad musulmana del Aid al Fitr, con la que culmina el mes sagrado de Ramadán y que se celebrará dentro de pocos días. El atentado es el ataque individual más mortífero registrado este año en Irak. El último gran atentado de DAESH en Bagdad se remonta al 17 mayo, que dejó cerca de 50 muertos.
Un suicida detonó el vehículo que conducía en medio de una multitud congregada cerca de la tienda de helados Yabar Abu al Sharbat, ubicada en la zona de Al Karrada, un barrio comercial del centro de la capital, informó a Efe una fuente policial. La heladería más popular y antigua de la capital iraquí estaba muy concurrida a la 01.00 hora local (00.00 hora peninsular española) debido a que durante el mes sagrado de ramadán, y más en verano, es habitual prolongar las noches en la calle.
La explosión destruyó e incendió varias tiendas aledañas en Al Karrada, donde la mayoría de la población es chií. Los bomberos debieron emplearse a fondo para luchas contra las llamas y los fuegos seguían vivos 12 horas después de la deflagración.
Hussein Ali, un exsoldado de 24 años, afirmó que seis empleados de una tienda que eran familiares suyos fallecieron y que sus cuerpos estaban carbonizados. "Voy a volver al campo de batalla. Al menos ahí conozco al enemigo y le puedo combatir. Pero aquí, no sé contra quién debo luchar", le contó a AFP.
El ISIS asumió la autoría del atentado en un comunicado firmado por Wilayat Bagdad (Provincia de Bagdad) y difundido en las redes sociales, en el que aseguró que el objetivo eran los chiís, secta mayoritaria en Irak e Irán.
"En el marco de las permanentes operaciones de seguridad de los soldados del califato en la ciudad de Bagdad, el hermano muyahidín (guerrero santo) Abu Maha al Iraqui logró hacer estallar su coche bomba en una concentración de renegados (chiíes)", se indica en la nota. El DAESH advirtió de que "con el permiso de Dios proseguirán los ataques de los muyahidines contra los renegados".
A Al Karrada se dirigió el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, quien afirmó que los terroristas "después de haber sido aplastados en los campos de batalla cometen ataques con explosivos en un intento desesperado". La población no recibió bien la visita del jefe del Gobierno, a cuyo convoy lanzaron piedras e increparon al grito de "vete".
Además, otro coche bomba estalló en el mercado popular Shalal, situado en la zona de Al Shaab, en el noreste de Bagdad y de población también mayoritariamente chií. Este atentado causó la muerte de un civil e hirió a cinco, además de causar destrozos en varios comercios.
UNA SEMANA DESPUÉS DE RETOMAR FALUYA
Los ataques se producen sólo una semana después de que las fuerzas gubernamentales retomaran la ciudad de Faluya, a unos 50 kilómetros de la capital, de manos del ISIS. Pero, pese a los reveses militares frente a las tropas regulares, el EI sigue teniendo capacidad para cometer atentados sanguinarios contra la población civil.
Estos ataques testimonian la incapacidad del Gobierno para poner en marcha medidas de seguridad eficaces en Bagdad, pese a la ayuda de la coalición internacional dirigida por Estado Unidos, que entrena a las fuerza iraquíes en el marco de la lucha antiyihadista.
Irak libra una cruenta lucha contra el EI desde junio de 2014, cuando el grupo terrorista se hizo con amplias zonas del norte y centro del país y proclamó un califato. Tras recuperar Faluya, la única gran urbe que sigue en poder del grupo terrorista es Mosul, al norte del país, cerca de la frontera de Siria.
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