Sara Morillo
Fachada del nuevo Motel One en Alexanderplatz, corazón del oeste de Berlín. D.R.
Berlín es una isla. Y no hablamos de Museumsinsel. No. Se trata de su atmósfera. La capital alemana se erige como tótem vanguardista, modélico y definitivamente inspirador para los sabuesos de la belleza. A la cabeza de las últimas tendencias de moda urbana, de tecnología puntera y de formatos artísticos, Berlín ha sabido reinventar el status quo de la vida moderna. Así pues, y dado este fenomenal caldo de cultivo, es comprensible que Motel One sea una referencia hotelera en todos los sentidos y para todas las categorías de viajeros.
Las claves, como los encantos de Berlín, son breves pero certeras: diseño de calidad, honradez en tarifas (79 euros con desayuno), excelente ubicación y adoración por la ciudad. ¿Hay trucos? Más bien varios galardones en su historial y cifras incontestables: 61 establecimientos que alcanzan las 16.547 habitaciones en ocho países y un índice de ocupación media del 79,4 por ciento en 2017.
Tal vez el amor a primera vista de Motel One tenga bastante que ver con una máxima: «Like the price. Love the design». La cadena hotelera acaba de inaugurar Motel One Berlin-Alexanderplatz, su décimo espacio en la capital. El fundador, Dieter Müller, procedente de una familia de empresarios de Münich, sostiene: «Con más de 360.000 visitantes al día, Alexanderplatz es la plaza más frecuentada de Berlín y la cuarta plaza más popular de Europa».
Bajo el lema «Fashion meets art» (la moda se alía con el arte), el recién llegado hace un guiño a la prosperidad de la moda en Berlín, por un lado, y al brío artístico que inunda los espacios públicos de la capital alemana, por el otro. El hotel se nutre de inspiración urbana en el vestíbulo y en el espacio One Lounge con los muebles de la firma italiana Moroso, cuyas joyas domésticas presumen de formas y acabados de primera calidad, sin descuidar el confort y compromiso con el medio ambiente desde hace 65 años.
La impronta del colectivo artístico KLUB7, detrás de grandes exposiciones locales, queda patente en la obra del vestíbulo y en el extraordinario grafiti del patio interior, que podemos disfrutar mientras damos cuenta del desayuno o de un cóctel en el One Lounge. También en las 708 habitaciones queda impresa la huella de KLUB7 con montajes de patrones y dibujos en las paredes.
En un guiño al universo de la moda, Motel One y la Universidad de Ciencias Aplicadas HTW de Berlín organizaron el concurso para diseñadores 4.0 Alexanderplatz - Streetwear meets Motel One. Hoy, los collages de las ganadores, Jana Steiger y Anabel Fiebelkorn, se exhiben en One Lounge. Aquí no acaba su compromiso con la vanguardia. Su apuesta tecnológica se manifiesta en las Smart TV de cada habitación, lo cual permite prescindir de teléfonos, dar servicio por este canal y conectar nuestro móvil o tableta a la televisión inteligente.
Y como la tecnología no es incompatible con la calidez, un regalo: al colocar la llave en la ranura de encendido automático, la pantalla nos dedica una hipnótica estampa: el crepitar de una chimenea encendida.Wie gemütlich!
No hay comentarios:
Publicar un comentario