César Urrutia
La entidad obtuvo un beneficio neto de 6.204 millones de euros.
Ni el Brexit, ni el freno a la globalización planteado por el nuevo Gobierno estadounidense parecen afectar a las perspectivas de Banco Santander como el mayor grupo financiero español. Su presidenta, Ana Botín, se muestra optimista.
"España está en una posición privilegiada. El teléfono no deja de sonar. Es un país atractivo para invertir que crea puestos de trabajo", ha respondido durante la presentación de los resultados del grupo.
Con una capitalización de 75.000 millones y 125 millones de clientes, Santander ganó el año pasado 6.204 millones de euros, un 4% más. "Hemos cumplido con nuestros compromisos", ha indicado la presidenta del grupo,Ana Botín.
Los bancos han tenido un ejercicio complicado y para el Santander, con una gran presencia en mercados como Brasil, Reino Unido y España, no ha sido una excepción. El volumen de créditos creció un 2% y el del los fondos un 5%. "Son buenos resultados contemplados en el contexto", ha valorado el consejero delegado, José Antonio Álvarez.
"La sociedad en general ha cambiado. No es que en el pasado no lo hiciéramos bien sino que el mundo ha cambiado. La confianza del cliente se basa en que se entienda lo que se ofrece", ha respondido Botín en referencia a la pérdida de reputación que sufre el sector bancario en España como consecuencia de la litigiosidad con parte de su clientela por la comercialización de productos que han sido llevado a los tribunales.
Santander es de los pocos bancos españoles que se ha librado de la crisis por las cláusulas suelo que azota al sector. Aun así, Botín salió en defensa del negocio tal y como se estructura en España al indicar que los bancos contribuyeron con 20.000 millones a saneamiento de cajas. "¿Qué podemos hacer? Ser transparentes y dar buen servicio a precios competitivos. El día a día nos debería hacer ganar confianza con los clientes".
Aún así, Botín insistió en que la nueva ley hipotecaria que prepara el Gobierno deberá apoyarse sobre dos pilares "transparencia y seguridad jurídica".
La presidenta de Santander, destacó que España podría ser beneficiario de la salida del Reino Unido de la Unión Europea y de la reestructuración del sector financiero. "Estamos comprometidos con Reino Unido y nos afecta lo que afecta a nuestros clientes. Si hay cambio de sede estaría bien que vinieran a España pero insisto en que la City tiene masa crítica y seguirá siendo importante pase lo que pase. Todavía no se han visto los efectos negativos, y habrá que ver en qué condiciones se produce la salida de Reino Unido".
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