Atentados en Cataluña. España duplicó en 2016 el número de amenazas del Estado Islámico. 4º ESO

LA RAZÓN.es ESPAÑA

A. Bartolomé

Las llamadas a recuperar Ceuta, Melilla o el falso Al-Andalus son una constante. Ya hay más presos islamistas que etarras en las cárceles.

El segundo zarpazo islamista desde los atentados de Atocha aquel fatídico 11-M de 2004 recordó ayer en Barcelona que las amenazas dirigidas a España, especialmente en los últimos meses, no eran en vano. Y ello pese a la extrema vigilancia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que han llevado a cabo 186 detenciones por yihadismo desde que el 26 de junio de 2015, hace dos años, se elevó a 4 sobre 5 la alerta por la amenaza terrorista. 259 desde 2012, en un total de 134 operaciones.

Esa intensa actividad policial ha propiciado que en la actualidad se contabilicen 270 presos en las cárceles españolas por terrorismo, proselitismo y fanatismo islamista, superando ya en una veintena al número de internos de ETA, que cuenta, además, con otros setenta reclusos fuera de España, según los datos aportados por el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, a principios de este mes.

Primero fueron los discursos de los líderes de Al Qaeda, Osama Bin Laden y Ayman Al Zawahiri, los que situaron a España en la diana yihadista. El testigo lo recogió el Estado Islámico (EI), que ha desbancado a Al Qaeda entre las preferencias de los radicales españoles que sueñan con unirse a la yihad contra Occidente.

En este escenario, el último balance de terrorismo elaborado por Interior correspondiente al año 2016 indica que el número de amenazas que sufre España de grupos terroristas yihadistas encabezados por Estado Islámico y Al Qaeda en el Magreb islámico (AQMI) se ha doblado, según los datos recogidos por Guardia Civil, Policia Nacional y Centro Nacional de Inteligencia (CNI) si lo comparamos con el año 2015.

Más recientemente, el pasado junio, dos campañas mediáticas yihadistas alentaban los ataques contra nuestro país. Una de ellas ponía en el punto de mira a las mujeres policía españolas, pero la otra puede haber sido determinante para explicar lo sucedido ayer en Las Ramblas: el Estado Islámico (EI) lanzaba en las redes sociales una ofensiva mediática para movilizar a sus lobos solitarios en siete países, con España entre ellos por primera vez.

Según documentos a los que tuvo acceso la Asesoría de Inteligencia y Consultoría de Seguridad (AICS) –la única que trabaja en inteligencia en España y una de las pocas en Europa–, los canales mediáticos del grupo extremista editaron un póster en el que aparece un dibujo de una mano con una pistola acompañado de un texto en inglés: «El lobo. Un soldado del EI ahí donde tú estás». En la parte inferior figuran ocho banderas: la española y las de Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Alemania, Francia, Bélgica y la UE.

Los informes de AICS son tajantes: «Es la primera vez que España es incluida en la lista de países considerados como objetivo directo, ya que hasta ahora las menciones que se han hecho al respecto lo habían sido siempre relacionadas con reivindicaciones históricas [Al-Andalus]».

Los analistas recuerdan que los otros seis países que aparecen representados con sus banderas sí que han sido atacados por «elementos relacionados directa o indirectamente con el Estado Islámico». «Sólo en el caso de España, este desgraciado hecho no se confirma. [...] Por ello se sospecha que España podría ser considerada por ciertos entornos islamistas al mismo nivel de objetivo a batir que el resto de los países representados», apunta AICS.

Las menciones a Ceuta y Melilla o a la presencia de España en Irak han estado siempre presentes en los pronunciamientos yihadistas. Un dato que subraya la Policía es que los grupos yihadistas, especialmente Estado Islámico, han comenzado a utilizar el español en sus comunicados y vídeos con cierta regularidad. A través de Telegram, por ejemplo, hay canales propagandísticos en español.

El año pasado hubo 44 menciones a nuestro país. Sólo en enero, Daesh difundió un vídeo del Ciberejército del Califato en el que se amenazaba con la conquista de París, Roma y España. En Twitter, EI distribuye siete vídeos con alusiones a la liberación de Al-Andalus y menciones a Ceuta, Melilla y Córdoba. El día 30 aparece un vídeo elaborado en la provincia iraquí de Ninawa en el que un encapuchado pide en francés la liberación de Al-Andalus y menciona a Toledo, Córdoba y Xàtiva (Valencia). El mismo día se publica un segundo vídeo elaborado por una productora de Daesh en Damasco que muestra un mapa de la Península Ibérica con referencias a Córdoba, Sevilla, Ceuta y Melilla. Finalmente, la revista «An-Naba» del mismo grupo habla sobre la decadencia de Al- Andalus y la intervención de los almorávides contra los reinos cristianos. En febrero hay una amenaza muy concreta por ser España uno de los países que ha aumentado su implicación en la lucha contra el terrorismo.

El retroceso de Estado Islámico en Siria e Irak lleva a pensar que «se va a incrementar el número de retornados», según apuntó el ministro del Interior en su reciente balance. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado tenían cifrados en unos 200 los yihadistas que desde España se trasladaron a Irak o Siria para integrarse en las filas de Daesh. «Es muy inferior a la de otros países. De estos 200, unos 50 han fallecido por la zona de conflicto y 34 han retornado, de entre ellos cuatro menores. El resto todavía están por allí y, desde luego, a nuestro país no han retornado», explicó Zoido.