J.O.
Almuzara lanza una biblioteca histórica sobre la contienda que reúne testimonios de la época de cada una de las ideologías.
Un soldado avanza con la bayoneta calada entre las trincheras durante la Guerra Civil
Todos los bandos para que no exista ninguno. Para evitar el presentismo, que es una enfermedad de nuestro tiempo actual y no caer en miradas empañadas de prejuicios, tópicos o lugares comunes, la editorial Almuzara ha decidido, con motivo de la celebración del 80 aniversaario del final de la contienda de 1936, lanzar una original iniciativa. Durante este año publicará, al ritmo de un libro cada mes, una selección de los principales y más interesantes testimonios de aquellos protagonistas que tomaron parte en la confrontación. Un conjunto de títulos donde todas y cada una de las ideologías estarán representadas, desde comunistas a falangistas, requetés, socialistas, oficiales de las dos trincheras, anarquistas y representantes de la Iglesia. El objetivo es que, a través de este conjunto de voces, se obtenga una visión menos condicionada y más objetiva de este suceso histórico.
Aquí estarán presentes Jesús Pérez Salas, Dolores Ibárruri, Federica Montseny, Gonzalo Torrente Ballester, Rafael García Serrano, Héctor Colmegna, Indalecio Prieto, Francisco Moreno, Simeón Vidarte, José Manuel Martínez Bande y Padre Caballero, entre otros. «La meta no era hacer una colección con los autores que escriben hoy sobre este tema, sino con aquellos que vivieron esos momentos y que escribieron sobre ellos en el pasado. Intentamos que hablen todos, respetando cada uno de los credos ideológicos que poseían, y lo más interesante es que nos brindan una visión nueva y sorprendente sobre esos acontecimiento», comentó Manuel Pimentel, director editorial de Almuzara.
Al frente de esta biblioteca, que, en realidad, es una reunión de primer orden de fuentes originales, sin la mediación de nin-gún historiador que interprete sus palabras, está Fernando Calvo, quien explicó ayer este nuevo proyecto: «La intención es circunscribirnos a lo que ocurrió en la Guerra Civil. No intentamos abordar los prolegómenos ni tampoco las consecuencias. Creemos que este enfrentamiento es un periodo diferenciado en sí mismo».
Decisiones cuestionadas
El primer lanzamiento corresponde a «Guerra en España», de Jesús Pérez Salas, un coronel republicano exiliado en México que aporta una visión sorprendente o insólita de lo que, según él, sucedió. «Él es una voz moderada –comenta Calvo–, pero que, sin embargo, no se ha reeditado. Nadie puede acusarle de sectario y lo interesante es que critica la intervención comunista y las decisiones militares que se tomaron en el bando republicano». Entre las medidas que cuestiona está la disolución del ejército republicano por uno de milicias, resolución que se tomó en los días posteriores al 19 de julio de 1936. Pero, también muestra sus severas dudas sobre la intromisión de la Unión Soviética en las operaciones militares. De hecho, los rusos decidieron en determinado momento amenazar con la retirada de la aviación si se iniciaba una ofensiva que, ahora se sabe ya, habría supuesto la división de las tropas nacionales y la toma de sus bases más relevantes. Para Fernando Calvo existe una razón que explica con claridad meridiana las palabras de Pérez Salas y que es esencial para comprender el devenir del frente: «El partido comunista no tenía una gran representación, pero lograron, a través de unas élites, ocupar los cargos importantes, algo en lo que ellos se movían muy bien. La Unión Soviética, sobre todo, estaba interesada en frenar la revolución en nuestro país, por eso hicieron esas purgas dentro de su propio bando. De hecho, la URSS se negó a respaldar ataques que hubieran podido dar la victoria a la República».
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