Raquel F-Novoa
- El coche del boxeador es uno de los modelos más exclusivos de la casa británica, se espera que el comprador pague entre 40.000 y 60.000 euros.
a leyenda del boxeo acababa de recuperar su licencia cuando sucumbió al rugido de este Rolls-Royce Silver Shadow Convertible en 1970, aunque el lujo de la marca inglesa ya lo seducía cuando aún se llamaba Cassius Clay.
No era su primer Rolls-Royce, pero sí su más simbólica adquisición automovilística: en la cumbre de su carrera profesional y habiendo ganado el pulso al «establishment» norteamericano, el «deportista del siglo» se compró este ejemplar: el más caro y de gama más altacomercializado por la marca.
El mejor boxeador de peso pesado condujo este coche durante seis años, en 1976 lo vendió a un rico coleccionista y mitómano empedernido. El coche regresó a Europa, donde pasó de mano en mano durante décadas. El próximo 6 de octubrela casa Bonhams lo venderá al mejor postor, los expertos estiman que el martillo caerá entre los 40.000 y los 60.000 euros.
Una ocasión única
El vendedor califica la ocasión como «única» por «la rareza y la exclusividad del cabrio» además de porque fue «elegido por una leyenda del deporte». Una de las cualidades que convencerán a los seguidores del boxeador es que, según afirma la casa, «el coche se encuentra en muy buen estado y nunca fue completamente restaurado». Esto significa que el vehículo todavía conserva algunas piezas tal y como las dispuso Ali.
El cabrio de Rolls-Royce se construyó a mano, pieza a pieza, y todavía presume de unos interores revestidos con materiales nobles: madera de nogal, cuero Connelly o alfombras Wilton son algunos de sus sellos de calidad.
Aunque la potencia máxima de su motor V8 nunca se llegó a especificar, su propietario la califica como «suficiente». El vehículo, según la casa de subastas, todavía es capaz de alcanzar los 193 kilómetros por hora.
Se espera gran participación en la puja dado a la expectación que despierta todavía el icono del boxeo, dentro de poco la casa Sotheby's subastará sus guantes y espera venderlos por 2.000 euros. Por otro lado, la casa Bonhams sigue consolidándose en la venta de vehículos, el año pasado recaudó nada menos que 6 millones de euros.
En el coche se incluirá una instantánea histórica en la que el boxeador posa con su amiga Diana Ross frente al Caesars Palace en Las Vegas junto a su inseparable cabrio blanco.
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