Teresa Sánchez Vicente
En el libro «Marcas negras en la era de la transparencia» se analizan cuáles son las cadenas de distribución más transparentes.
Lineal del supermercado - J. J. ÚBEDA
La identificación de quién es la empresa que está detrás de la fabricación de un producto no es obligatoria en España. Por ello, se siguen vendiendo marcas -tanto de fabricantes como blancas- que son opacas para el consumidor al no incluir esta información ni en el envase ni en la etiqueta. En base a esta realidad, en el libro «Marcas negras en la era de la transparencia» coordinado y escrito por Fernando Olivares junto a otros profesores de la Cátedra de la Marca Corporativa de la Universidad de Alicante se analizan cuáles son las cadenas de distribución más transparentes que operan actualmente en el mercado.
En esta línea, de la obra mencionada se extrae que Mercadona es el supermercado más transparente de España ya que tanto Hacendado como Deliplus «identifican directamente al fabricante real». «La mayor parte de los productos «transparentes» lo son por identificar al fabricante con su símbolo o logotipo corporativos (60%). En el resto de los productos la identificación del fabricante se hace con mención expresa de razón social o nombre de marca», concluye el autor coordinador de la obra. Entre los fabricantes de productos Hacendado se encuentran Sanchis Mira - Antiu Xixona, Casa Pons, Cidacos, Casa Escuris, Tarradellas, Dafsa, Iparlat, Lactogal, Queserías Entrepinares o La Española, entre otros. Para Deliplus fabrican RNB, Maverick y We Colors.
La segunda posición en cuanto a transparencia la ocupa Dia ya que en todos los productos de su marca de distribución analizados por la Cátedra de Marca Corporativa se identifica al fabricante mediante la razón social y la denominación comercial. Algunos de las empresas que trabajan para supermercados Dia son Legumbres Luengo, Juver, Puleva, Aceites Coosur y Gullón, entre otros.
A continuación, se situaría el grupo Eroski, una cadena donde se menciona al 93% de las empresas que elaboran los productos mediante denominación,. Para esta cadena fabrican Puleva, Galletas Gullón, Legumbres Luengo y Conservas Dani, entre otros.
Los últimos puestos de la lista elaborada por los profesores de la Universidad de Alicante los ocupan Alcampo, Lidl y Carrefour, por este orden ya que en algunas de las etiquetas utilizadas en las marcas blancas de estas cadenas se encripta al fabricante mediantes códigos RGSEAA o CIF.
El caso de las marcas negras
Por otro lado, dentro del libro también se habla de las denominadas marcas negras, que se definen así porque enseñas líderes «subcontratan la fabricación del producto, sin informar de ello al consumidor». De este modo, la compañía dueña de la marca actúa como simple comercializadora al encargar «la fabricación completa» a terceros para vender el producto en los lineales de los establecimientos con la etiqueta de su propia marca y sin informar sobre quién está realmente detrás de su elaboración.
El principal problema de esta práctica -totalmente legal y reconocida por los directivos del sector de gran consumo- reside en la falta de transparencia ya que se oculta información. «La razón principal por la que el consumidor no lo sabe es porque la marca no cuenta, ni por activa ni por pasiva en medio alguno, que los productos (o parte nuclear de los mismos) que comercializa son fabricados por otras empresas, que permanecen ocultas al consumidor», señala Olivares en su obra. «No hay problema siempre que el consumidor lo sepa o pueda saberlo; y que pueda saberlo porque su marca se lo cuente que pueda acceder y conocer libremente esta realidad», añade.
En este sentido, el profesor de la Universidad de Alicante menciona algunos casos de marcas corporativas «que fabrican también en la sombra para terceros», como pueden ser Persan (España), Bonnysa (España) Sada (España), Ice cream factory comarker (España), Gerber Foods (Reino Unido), Essity (Suecia), Allfreez (Bélgica) o Incopack (Bélgica), entre muchos otros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario