EL PAÍS DUI
J. J. Gálvez
El partido refuerza en Baleares y Comunitat Valenciana su campaña contra el nacionalismo en los colegios.
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, este miércoles en el Congreso. LUIS SEVILLANO
Ciudadanos ha decidido, en pleno procés, agitar con fuerza la bandera de la lucha contra el supuesto "adoctrinamiento nacionalista" en las escuelas. Pese a quedarse solo la pasada semana en el Congreso, cuando la Cámara rechazó una moción que presentó al respecto, el partido ha llevado a primera línea del debate político su campaña contra "la manipulación y tergiversación" independentista en los colegios, en boca de Marta Martín, portavoz de Educación en el Hemiciclo. El propio Albert Rivera dio a conocer una propuesta de ley para crear una agencia independiente que inspeccione los centros docentes para "garantizar la neutralidad ideológica y política". Y la formación, que ha avivado su ofensiva en Baleares y la Comunitat Valenciana, tiene previsto reunirse el lunes con el Defensor del Pueblo para abordar la cuestión.
"Hemos trabajado en este tema desde hace mucho tiempo. Yo ya se lo dije al ministro de Educación en su primera comparecencia en el Congreso y, desde entonces, sumo 141 intervenciones hablando de este asunto", subraya Martín, apenas unos minutos después de que Íñigo Méndez de Vigo haya asegurado este miércoles que no existe "conflicto de ningún tipo con la educación en Cataluña" y haya pedido que se investiguen "los casos concretos" de adoctrinamiento. Ciudadanos ha denunciado la existencia de libros de texto con frases como "habla catalán siempre, no necesitas los castellanismos".
Según explican fuentes del partido, la dirección de la cuarta fuerza política del país considera el "adoctrinamiento" como uno de los grandes problemas en Cataluña. "Que también empieza a asomar en Baleares y Valencia. Y queremos que se actúe ya", apuntan esas mismas fuentes. "Aquí tenemos un sistema mimético al catalán, pero de una intensidad menor", denuncia Xavier Pericay, parlamentario de Ciudadanos en el Hemiciclo balear y responsable del área de Educación. En las islas, la formación ha pedido incluso la dimisión del conseller, Martí March.
"Hay un proceso de adoctrinamiento nacionalista en los centros escolares de la Comunitat Valenciana. Es muy peligroso y atenta claramente contra la Constitución y el estatuto de autonomía", añade, por su parte, Mari Carmen Sánchez, portavoz del partido en las Cortes de esta comunidad. La dirigente política, que mantendrá el viernes un encuentro con el Síndic de Greuges para trasladarle más supuestos casos sucedidos en esta región, ha asegurado que han detectado "agendas escolares con referencias a los Païssos Catalans, presiones a los alumnos exentos de valenciano o libros de texto manipulados”.
Pericay, uno de los firmantes del manifiesto fundacional de Ciudadanos, insiste en que esta cuestión forma parte del eje transversal del discurso del partido durante los últimos años. Pero, a su vez, detalla cómo el procés ha favorecido que se sitúe en primera línea del debate político. "Lo que ha ocurrido en Cataluña lo ha desatado. Se han acrecentado los ejemplos de adoctrinamiento y también se ha perdido el miedo a denunciar", apunta el parlamentario. "Lo ha puesto en el foco mediático", añade Martín.
Pero el Gobierno reduce el problema a casos concretos. Y los consejeros autonómicos, directamente, lo niegan. "Son acusaciones infundadas y mentiras sin escrúpulos", subraya Clara Ponsatí, responsable del área de la Generalitat catalana. Ciudadanos ha llegado a chocar con el PP por este tema. Los populares acusaron al partido de Rivera de "electoralistas". "Creíamos que iba a ser el Gobierno quien iba a ayudar. Nosotros no vamos a permanecer paralizados.", ha dicho Rivera, como representante de una formación que está convencido que este tema les ayuda a posicionarse como el partido que con más "firmeza y claridad de ideas" se enfrenta al separatismo.
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